Pasar al contenido principal

Una mirada a los autos del futuro: automatización sobre ruedas

Escrito por:
UTEC
11 August 2021

La pandemia por la COVID-19 también retrasó el desarrollo de los vehículos autónomos en el mundo y se proyecta que su lanzamiento al mercado ocurrirá recién en el 2035, según un reporte de PwC 2020. Sin embargo, la industria automotriz ya trabaja en una transición hacia un futuro de la conducción automatizada. En ese camino destacan dos marcas: Google y Tesla Motors.

En competencia

Google. En el 2013 sometió a sus empleados a pruebas experimentales. Ellos debían monitorear el trayecto de los vehículos, pero los resultados revelaron que los conductores humanos se distraían y se quedaban dormidos. Por eso, Google creó una flota de vehículos sin volante ni acelerador ni frenos. Sus autos se encuentran en fase experimental y solo se usan como taxis autónomos en zonas urbanas de tránsito a velocidades bajas. 

Tesla. Comercializó su primer vehículo autónomo en octubre del 2015, bajo el nombre de Model S. Aunque su manejo era semiautónomo, destacaba porque la inteligencia artificial podía maniobrar por sí sola en tráfico abierto y en procesos como estacionar el vehículo y salir del garaje. Con el tiempo, la compañía desarrolló su tecnología de autoconducción antes que el resto de la industria. 

Otras experiencias

En Silicon Valley y sus alrededores se registran al menos veinte esfuerzos comerciales de autoconducción. Gigantes como Nissan y Ford compiten con compañías de tecnología, como Apple, Baidu y la misma Google. Sin embargo, el desarrollo de estos vehículos dependerá de las necesidades y posibilidades de las personas, además de que aún está por definirse un marco legislativo y políticas de seguro adaptadas a esta nueva realidad.

Accidentes registrados

La automatización vehicular sigue a prueba. En el 2016, el estadounidense Joshua Brown, dueño de un Tesla Model S, murió mientras miraba una película al interior de su vehículo. La tragedia abrió un debate sobre la seguridad de esta tecnología y motivó acciones del Gobierno de Estados Unidos, como ordenar a los fabricantes de automóviles a entregar informes de los accidentes en los que estén implicados sus vehículos autónomos.